Tamaño de una web, ¿cual?

Hace unos días un amigo me enseñaba la página web del último juguete que esperaba comprase, un portátil del tamaño de una PDA. Para el amante de los gadgets tecnócratas resulta una verdadera monada, una PDA de formato horizontal con un mini (¿o micro?) teclado escamoteable. El cacharrito no se si es útil, pero como diseñador de aplicaciones web el detalle que me llamó la atención es el formato de la pantalla: 600 por 400 píxels, formato apaisado para una PDA con Windows XP.

Cuando comencé a hacer webs allá por el prehistórico 1996 (en términos Internet) estaba claro que el tamaño de una web debía acomodarse a las pantallas más comunes por aquel entonces: 640 por 480 píxels. A partir del año 2000 y su homónimo "efecto" el formato evolucionó a 800 por 600, y hace año y medio un cliente se me enfadó por seguir usando este formato, él navegaba en su portátil maximizando la ventana de su navegador a 1024 por 768 píxels. Ya estaba casi acabada y hubo que rehacer este detalle, a pesar de que de buen principio nadie parecía preocupado por ello hasta que a alguien se le ocurrió maximizar la ventana.

Era cierto, con el auge de los monitores de 16", las TFTs de 15" y el mayor número de ventas de portátiles hace una año ese tamaño era el estándar. Además, teniendo en cuenta que Explorer 5 se había convertido en el líder abrumador en estas pantallas por la desaparición definitiva de Netscape, qué fácil se nos había vuelto la vida a los diseñadores, podiamos pensar "en un tamaño estándar" (y un navegador estándar)... Sí, que en los teléfonos WAP se puediese navegar por Internet no le preocupaba a nadie. ¿WAP? ¿Quién usaba eso, si no se veía nada?

Vaya, ahora resulta que hay PCs, PCs de los de verdad, de los de Windows XP, de 600 por 400, y más tipos de máquinas: el formato estándar de pantalla en casa y en la oficina ya es de 1200 por 1024, y los portátiles tienen formato apaisado de 1200 por 800, pero ahora también hay portátiles de 17" apaisados de 1440 por 920, y pequeños portátiles, muy ligeritos y de pantallas de 12", de los que ya no me he atrevido a preguntar cual es su tamaño en píxels, ¿para qué? Encima ahora Netscape se ha reencarnado y parece gozar de mejor salud que Explorer, Opera ha mejorado y es un contendiente serio, y los navegadores de Mac y Linux no les andan a la zaga.

Me parece que habrá que volver a pensar muy bien a quien dirijimos nuestras webs otra vez. La tregua del Explorer 5 y los 1024 por 768 se acabó, nuestro clientes, nuestros lectores, nuestros visitantes, están ahí fuera, dotados de una diversidad de medios más rica de la que ha habido nunca. No nos extrañemos de que dentro de poco hasta las Game Boy se conecten a Internet, también habrá que pensar en ellos.

Pero yo, que me gusta ser práctico, me pregunto: ¿vuelve a ser el formato de 800 por 600 el estándar?