Plataforma Tecnológica

La web es un entorno de comunicación que ha estado evolucionando sin parar en los últimos 10 años. La razón es muy evidente pues para la empresas supone un medio excepcional donde extender su imagen de marca al mismo tiempo que permite extender sus servicios, e incluso ofrecer nuevos productos.

Todo esta evolución ha pasado por diversas fases. Reconoceremos alguna como los enormes directorios de webs al estilo Yahoo, cuando mayoritariamente las webs eran meros catálogos online, la que implicó la extensión del plugin Flash y sus películas que marcaron un momento glamuroso pero superado, la aparición de los portales con webs muy planas y páginas muy densas y llenas de cuadros de resúmenes, la fase de los banners, o la actual marcada por Google, los buscadores y los anuncios por palabras. Ahora se tiende a llamar al momento actual como la Web 2.0 como señal del momento de madurez en el que estamos.

El estándar actual se basa en la tecnología XHTML, un paso previo a que la web funcione únicamente en XML, el lenguaje en el que se basan muchas soluciones EDI y que se establece como un formato muy limpio y universal de traspaso de información, en oposición al HTML “sucio” en el que se basan la inmensa mayoría de webs actuales (HTML 4.01 transitional).

Estos estándares tecnológicos permiten separar el código de página, del diseño, de los datos y de la usabilidad, entre otras cosas básicamente con formatos de código abierto y estandarizado como hojas de estilo CSS3 o lenguajes de programación de aplicaciones como PHP. Ahora la labor gráfica del diseño de una web se puede cambiar en cualquier momento sin que todos los datos, contenidos, servicios y ofrecimientos de la web se vean alterados. La clave no es el diseño sino la usabilidad, diseño que si se ha planteado correctamente se podrá “cambiar” cuando se quiera, renovando el aspecto de la web, pero siempre teniendo los datos y servicios creciendo, no teniendo que volver a empezar de nuevo.

El mundo de las comunicaciones móviles abre nuevas posibilidades y se hace necesario invertir correctamente en este medio sin olvidar los tradicionales. En el futuro debemos esperar que aparezcan nuevos medios y tecnologías que requieran el mismo tipo de experiencia y de análisis.

Para ofrecer esta posibilidad hace falta basar la web en un entorno de gestión de datos, en el caso de una empresa en un ECM (Enterprise Content Management). Un ECM es una decisión estratégica en el negocio de una empresa porque propone un formato de base de datos y aplicaciones en el que se basará no solo la web de la empresa, sino la forma en que sus datos se comparten con los visitantes y clientes. Los ECM se han convertido en herramientas asequibles que ya no son coto solo de grandes multinacionales gracias al uso de tecnologías muy compartidas en la Red Internet y unos precios que ya no son prohibitivos. Sin un sistema de gestión de contenidos ya no puede haber web y no puede haber rentabilidad.

Al mismo tiempo que el entorno Internet y móvil se consolidan nos encontramos en un momento en el que el software llamado libre se ha desarrollado hasta ser un realidad que ya no está aquí solo para abaratar costes, sino también para ser parte del desarrollo actual creando soluciones más a medida y en un tiempo más corto, cercano a los estándares económicos e industriales. En el sector pyme se pueden producir grandes ahorros y beneficios si se sabe usar las opciones más maduras y optimizas para diversas tareas de gestión y de edición.